Han pasado ya unos días desde que las dos chicas se fueron.
Hasta el momento he estado muy ocupado en los quehaceres diarios de unas vacaciones: dormir, comer, pasear en moto, salir a la noche...
Aprovecho estos momentos en los que Mikel está en un curso de joyería para escribir.
Sagra y Marisol volvieron contentas del viaje, ha sido un acierto centrarnos sólo en Bangkok y las islas del sur: hemos podido hacer compras, descansar, tostarnos y disfrutar de todo lo que hay en este fantástico lugar.


La cara lo dice todo.
Y como no, hemos hecho muchísimas compras: ropa para nosotros, hijos, hijas y demás peñita. Incluso hemos mandado 2 cajas por correo porque había cosas que abultaban mucho. Tal como veis Mikel estaba de brazos cruzados sin comprar nada, y las chicas a dos manos.

Laster arte.
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